abril 17, 2013

Son lugares

En algún momento podés basarte en mentiras para escribir. Eso fue lo que pasó, por ejemplo, con NDC. Muchos me preguntaban cómo podía escribir sobre esa temática estando de novio. Y en realidad yo estaba haciendo una extrapolación con algún otro momento de mi vida, un tiempo con muchas dudas, y lo puse en el hoy, alimentado por las anécdotas que me tocaba escuchar. Pero al final siempre mis escritos hablan de mí, aunque no necesariamente del "ahora". Por supuesto, cualquiera con un poquito de sensibilidad puede desmenuzarme a piacere leyendo lo que escribo.

La verdad es que sería bastante terrible que todo lo que escribo hable de mi. Yo no sé... mi mundo no es tan grande... Yo absorbo lo que le pasa alrededor a alguien o alguna vez estuve triste por alguna razón y lo traigo al hoy ¿no? Pero este momento está muy lejano de cualquier sensación de tortura que tuve en otro tiempo, siempre antes necesitaba como ponerme en el artista torturado para lograr algo y este momento no es así. Tiene algo muy jugado ponerse en esa situación extrema, desarrollar la idea de la culpa. En algún punto tiene que ver con "Situación", ése tipo de textos. Muestro otro perfil, otra forma de componer; pero en definitiva se trata de la misma persona. No estoy muy seguro de que sufra cuando hago eso, pero en esos casos necesito concentrarme y capturar esa emoción para que no se me escape. Igualmente, todo no deja de ser ficción, actúo un personaje.

No encuentro que haya que ser necesariamente honesto en el arte; hay que ser honesto en la vida, es una cuestión de principios.

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