noviembre 28, 2010

Imaginación inducida

Cuando le explicás a alguien algo y no se lo imagina en la cabeza.

Te parás atrás, la agarrás de los hombros, le pedís que cierre los ojos y que se relaje. Le hablás bien cerca del oído, con detalles, poniéndole ritmo a su respiración para que se haga la imagen de lo que estás diciendo. Después abre los ojos y ya sabe qué y cómo era lo que le estabas queriendo decir.

Algunos necesitan ayuda para imaginar.

2 comentarios:

Flo® dijo...

Buenas! Buenisimo el blog! te invito al mio:
www.palabrastoxicas.blogspot.com

Anónimo dijo...

o los podes slapear bien fuerte y que se lo imaginen.
la violenta. jojo