abril 06, 2008

Random quote, right time

El domingo pasado, todavía con dolores de cabeza, agarré el libro que no empecé a leer en una hoja cualquiera. Y leí:

Allie y él estaban muy cerca, aunque no se tocaban. Noah vio como el pecho de la joven se levantaba ligeramente con cada inspiración y volvió a fantasear con el contacto de su cuerpo, pero luchó contra aquellos pensamientos. [...]
-¿Recuerdas que pocas noches antes que me marchara, nos sentamos juntos a mirar una tormenta?
-Claro que lo recuerdo.
-Cuando volví a mi casa, no podía dejar de pensar en ese día. Me obsesionaba el aspecto que tenías aquella noche. Siempre te recordé así.
-He cambiado mucho?

Cuando respondió, le rozó las manos.
-En realidad, no. Al menos en las cosas que yo recuerdo. Has madurado, desde luego, y se nota que has vivido, pero aún conservas el mismo brillo en los ojos. Todavía lees poesía y navegas en el río. Y todavía tiene una dulzura que ni siquiera la guerra pudo robarte.[...]
-Allie, antes me preguntaste qué era lo que mejor recordaba de aquel verano. ¿Qué recuerdas tú?
-Recuerdo que hicimos el amor. Es el recuerdo más vivo. Tú fuiste el primero, y fue mucho más hermoso de lo que nunca hubiera llegado a soñar.

Noah bebió un trago de whisky, recordando, reviviendo los viejos
sentimientos, pero de repente sacudió la cabeza. Las cosas ya eran demasiado difíciles como estaban.

El cuaderno de Noah; Nicholas Sparks.


Ese domingo la cita fue acertada. Y este domingo, una semana después, la segunda parte también tiene lugar.

No hay comentarios.: